Competencia por atraer inmigrantes
La crisis que enfrentan países desarrollados es que no tienen suficientes inmigrantes
Por Luis Fierro Carrión (*)
Twitter: @Luis_Fierro_C
Mientras que los titulares de la prensa están llenos de historias de inmigrantes indocumentados tratando de ingresar a Estados Unidos o Europa, la verdadera crisis que enfrentan los países desarrollados es que no tienen suficientes inmigrantes.
Esta situación se puso de evidencia durante la pandemia de COVID-19, cuando se estima que el ingreso de inmigrantes (principalmente latinoamericanos) a EE.UU. cayó en cerca de dos millones de personas, lo cual ha creado un mercado laboral en el cual hay casi dos vacantes por cada persona desocupada, y se está generando presión al alza para los salarios (lo cual, a su vez, ha repercutido en mayor inflación). Otro factor fueron las muertes y enfermedades crónicas derivadas de la pandemia.
La carencia de personal se notó en especial en el área de cuidados de salud (doctores, asistentes médicos, enfermeros, personal de laboratorio, etc.), lo cual llevó a programas especiales para atraer especialistas de salud. Pero también se ha puesto en evidencia en áreas como informática, agricultura, restauración, hotelería, construcción, cuidado infantil y para personas de la tercera edad, etc.
El problema es aún más agudo en países en los cuales la población está cayendo (Japón, Italia, Alemania, Portugal, los países Bálticos, Corea del Sur, etc.). Incluso la población de China, que acaba de ceder a India el primer puesto entre los países más poblados, ha comenzado a declinar, y se estima que bajará de 1.425 millones ahora a 771 millones en el 2100. Se estima que Japón tendrá un déficit de 6,4 millones de personas en su fuerza laboral para el 2030.
Los países con políticas migratorias más sensatas están comenzando a atraer a inmigrantes, especialmente aquellos con estudios universitarios y jóvenes. Ejemplos destacados de ello son Canadá, Australia y Alemania. En estos y otros países los estudiantes que reciben posgrados reciben ofertas automáticas de residencia y ciudadanía; mientras que Estados Unidos trata de obligar a los estudiantes que reciben títulos de cuarto nivel a regresar a sus países de origen.
EE.UU. también ha limitado severamente el número de visas H1-B, dedicado a profesionales en áreas como ciencia y tecnología, a tal punto que normalmente la cuota anual de visas se agota en febrero de cada año. Algunos congresistas han propuesto expandir dichos cupos, y los Demócratas han propuesto vías para legalizar a los 11,4 millones de inmigrantes indocumentados en el país (muchos de los cuales están subempleados por no tener permiso laboral).
Pese a las restricciones a la inmigración legal, EE.UU. sigue siendo el país al cual más personas aspiran a emigrar, seguido por Canadá, Alemania y España.
Los países con la mayor proporción de inmigrantes tienden a ser los emiratos árabes (Emiratos Árabes Unidos 88 %; Qatar 77 %; Kuwait 72 %); seguido por los microestados europeos (Liechtenstein 67 %; Mónaco 67 %; y Andorra 59 %).
En EE.UU. se pasaron leyes para fomentar la industria de la informática, tecnologías verdes, telecomunicaciones, pero la expansión se ve limitada por la carencia de trabajadores calificados; de hecho, están quebrando empresas porque no logran atraer empleados.
Otro factor será el aumento de “nómadas digitales”, quienes trabajaran remotamente desde cualquier lugar del mundo (particularmente, países cálidos, de bajos costos y seguros) para empresas de los países desarrollados.
Mientras los partidos de ultraderecha y xenofóbicos continúan atacando a la inmigración (Trump ofreció que construiría un muro en la frontera de México y que el gobierno de México lo pagaría; ninguna de estas cosas ocurrió), gradualmente los políticos y la población entenderán que la verdadera crisis será atraer suficientes inmigrantes calificados.
Los países en desarrollo, como Ecuador, deberán hacer esfuerzos por retener a sus trabajadores calificados, e implementar medidas para atraer a “nómadas digitales”, para lo cual ofrecer buena infraestructura (conectividad, servicios de salud) y seguridad será clave.
(*) Una versión más corta de esta columna fue publicada el 20 de marzo, 2023, en el Diario “El Universo” de Ecuador:
https://www.eluniverso.com/opinion/columnistas/competir-por-migrantes-nota/
Ceremonia de ciudadanía de EE.UU. Foto: National Park Service, Michael Quinn